Franco Navarro no calla nada: "Image manejó a la selección a su antojo"
El DT del Juan Aurich no planea volver a la blanquirroja. Cree que los representantes no han aportado nada al fútbol peruano
Mauricio Gil Ballón
En menos de un año, ha pasado al extremo opuesto con el Juan Aurich. En el 2008 peleó la permanencia en Primera y hoy comanda la tabla del Descentralizado. Mas el reto continúa. Con más de 10 años de carrera como técnico, confía en el trabajo de su equipo y agradece el profesionalismo de la dirigencia del “Ciclón”. A pesar de que su realidad actual es el equipo norteño, se animó a hablar de su paso por la selección, en la que cree que tuvo un buen trabajo más allá de los problemas internos. La enemistad con Carlos Delgado parece insalvable. Franco siempre fue franco.
¿El Aurich está listo para la presión de ser protagonista?
Es lo que queremos. Para eso nos hemos preparado con gente de experiencia. Prefiero la presión de ahora que la del descenso. Tenemos un buen grupo. Creo que estamos en el camino correcto. La incorporación de jugadores de trayectoria, mezclada con la experiencia cercana de la baja del 2008, nos hace un equipo importante.
¿Por qué asumió el equipo el año pasado, cuando estaba tan cerca de la baja?
El presidente (Edwin Oviedo) invirtió mucho en el deporte de esta ciudad y decidí aceptar su proyecto. En realidad, no creo que volvería a asumir un reto de esa naturaleza porque es muy difícil. No hay nada más traumático para un equipo y el técnico que tener la baja muy cerca.
¿Siente que el club se está manejando con gestión empresarial, que es lo que intenta Edwin Oviedo?
El año pasado, desde que asumí la dirección técnica, no se dejó nada al azar. No había margen para el error. En ese sentido, tengo que reconocer el esfuerzo que ha hecho la dirigencia. Desde que nos salvamos del descenso, hemos tenido la facilidad de planificar el año de trabajo: pretemporada en El Bosque, partidos amistosos, contratación de jugadores… Tenemos medianamente lo que hemos pedido. Si todo lo que planeó el comando técnico no se apoyara en la dirigencia esto no caminaría, pero ellos lo tienen muy claro. Aunque va a demorar, el proyecto y el compromiso existen. Necesitamos forjar una historia importante como institución.
¿Su principal campaña como director técnico sigue siendo la que hizo con Estudiantes de Medicina?
Fue una experiencia inolvidable. Fue una campaña donde ganamos en casi todas las provincias y no perdimos con los grandes. Salimos del tema del descenso, el equipo arriesgó y llegó a una final con casi nada. De haber existido en ese año, hubiéramos clasificado a la Sudamericana. Para Ica hubiera sido algo fantástico. Ya al año siguiente me fui al Alianza, luego al Boys y a la selección.
¿A tres años de distancia de la selección, qué siente?
La selección es complicada para cualquiera, ya que se tiene que cubrir la expectativa de todo un país, con la historia de no haber clasificado a un mundial en más de 20 años. La preocupación por dejar una base siempre estuvo. Considero que si no se trabaja con los jugadores del medio difícilmente se puede ensamblar un equipo con tres días de reunión con los “extranjeros”. Fue lo que intentamos.
¿Insiste en que Carlos Delgado fue el hacedor de la renuncia de Pizarro a la selección mientras usted estuviera al mando?
Seguro. Además, solo basta remitirse a las evidencias del último problema con él. Un representante está para asesorar y marcar el camino que le corresponde, más allá de las consecuencias económicas. Lo dije en su momento: el representante no está para opinar sobre las decisiones del técnico.
Entonces, más que un problema de comunicación con Pizarro, fue un mal asesoramiento.
Pues, sí. Ni siquiera jugadores que participaron en 2 o 3 mundiales actuaron como lo hizo Pizarro: enviar una carta a la federación y condicionar la permanencia del entrenador con su vuelta. Creo que Image manejó la selección a su antojo. Han puesto y sacado técnicos. Por ejemplo, trajeron a Paulo Autuori, pelearon por la resolución de su contrato y luego estaban presentando a otro técnico. Eso es poco transparente.
¿Ha hablado con Pizarro desde entonces?
Lo vi en la última Copa América en Venezuela. Pero eso queda en la intimidad. Lo único que ha hecho es indisponerse con la prensa y la gente. Él podría tener el país a sus pies por la calidad de jugador que es, pero ha cometido muchas equivocaciones juntas.
¿Sin la presencia de Image y los resultados de la selección, hubiera sido posible la renovación de tu contrato?
El grupo Image, en el tema de los técnicos, tiene mucho peso. Ahora también han maltratado a Chemo como han querido y a más no poder. Cuando ellos no ponen al técnico, están buscando por todos los medios desestabilizar e intentar que el equipo no camine. Cuando hay un técnico que ellos manejan, todo es más tranquilo. Esa es la impresión que tengo.
¿Uno de sus objetivos como técnico sería volver a la selección?
Es un tema que ahorita no puedo tocar, ya que hay un técnico. Además, le tengo un cariño especial a Chemo, porque lo vi crecer y aparecer en el fútbol. Deseo que, más allá de cómo termine, le sirva para crecer profesionalmente. Se tendrá que comer todos los insultos, porque ese es uno de los riesgos cuando uno asume el puesto. Asumirá sus responsabilidades y habrá que reconocer sus aciertos.
¿Cree que es sintomático que Pizarro haya tenido problemas con Chemo como usted?
La verdad, no lo sé. Pero yo nunca me peleé con Claudio. No tuve ningún roce con él ni enfrentamientos. Todo fue dentro de la formalidad.
¿A un mes del Caso Image, cuál es su opinión?
Lo que lamento es que Claudio esté metido, porque es un jugador exitoso que se la ha ganado desde abajo. Él comenzó en Chimbote y luego cayó parado en Europa. Pero quedó pendiente con la selección. Image no ha actuado con transparencia. Es normal, todo el mundo quiere ganar plata, cada uno en su lado. El problema es cuando uno quiere ser parte y tomar decisiones dentro de una selección, equipo o dirigencia. Eso está mal.
¿Más allá de su enemistad con Delgado, lo considera un mal elemento para el fútbol peruano?
Bueno, los que están con él y a quiénes representan estarán felices. Me imagino que habrán ganado mucha plata con él. Pero en mi caso, sobre todo cuando estuve en la selección, se equivocó... y más conociendo los códigos del fútbol. Hubo demasiados intereses dentro de la selección. Ahora las evidencias ratifican que yo no estaba equivocado. Después, él puede hacer lo que le dé la gana. Varios representantes ganaron buena plata en su momento gracias a los jugadores, pero por el fútbol peruano no aportaron nada.
elcomercio.com.pe, 17 de Abril del 2009