martes, 26 de mayo de 2009

Futbolistas agremiados acataron una huelga en el 2003 que sí tuvo resultados favorables

Futbolistas agremiados acataron una huelga en el 2003 que sí tuvo resultados favorables

Un antecedente a considerar: por aquella medida de fuerza se llegó a crear la Cámara de resolución de disputas y el estatuto del futbolista. Esta vez no se paralizará el torneo

Lo que un principio se consideró como una segunda huelga en el fútbol peruano, con el apoyo de los jugadores que militan en el extranjero, trascendió que esta vez no habrá una paralización del campeonato como en el 2003, pero tienen en claro la exigencia de una mayor participación de los futbolistas en el directorio de la Federación Peruana de Fútbol (FPF).

“No habrá ninguna huelga y ninguna paralización del campeonato, ni nada por el estilo. Esta decisión que están tomando (los futbolistas) la comprendemos y la apoyamos”, afirmó Juan Carlos Oblitas en radio Ovación, tras haber participado la semana pasada en una reunión en las oficinas del Safap junto a los técnicos Juan Reynoso (‘U’), Antonio Alzamendi (Total Chalaco) y Víctor Rivera (San Martín).

En la edición de hoy de Deporte Total se revelan las exigencias de los futbolistas peruanos que darán a conocer mañana a través de una conferencia de la agremiación (Safap) que los representa: Voz y voto en las elecciones de la FPF (incluso tienen un candidato: Juan Carlos Oblitas); revisión del sistema por el que se elige al presidente; la cancelación de las deudas pendientes de ciertos clubes; entre otras.

“Ya que no se puede hacer el cambio a través de los clubes y las bases, los jugadores intentarán que haya un cambio radical por la manera en la que se está legislando para las elecciones en la federación (FPF). No se quiere sacar a nadie, lo que se pretende es tener una mayor participación de la gente que está realmente involucrada en el fútbol”, agregó el técnico celeste.

MEDIDA CON RESULTADOS
Por falta de pagos y, ante el desamparo total de la FPF, debido a la más grave crisis económica e institucional del fútbol peruano, el 10 de noviembre del 2003 los futbolistas peruanos decidieron irse a la huelga. Dicha medida obligó a la federación a dar por terminado el torneo Clausura antes de tiempo.

Sin embargo, con el apoyo de la agremiación (Safap) los futbolistas lograron hacer que se atiendan sus pedidos. Se honraron las deudas y, además, se creó la Cámara de resolución de disputas y el estatuto del futbolista, dos instancias importantes que han servido para que se proteja al futbolista nacional cuando algunos clubes estaban acostumbrados al maltrato y a la impunidad.


elcomercio.com.pe, 26 de Mayo del 2009

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